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El C-130 de la NASA desempeña un papel vital en el éxito de la prueba de lanzamiento aéreo de paracaídas

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El avión de carga C-130 de la NASA suelta un vehículo de pruebas en forma de dardo sobre el Yuma Proving Ground del Ejército de EE.UU. el 9 de enero para iniciar la secuencia de pruebas de un sistema de paracaídas del Boeing Starliner. Crédito de la imagen: U.S. Army Yuma Proving Ground

El C-130 Hércules de la NASA, gestionado en la Oficina de Aeronaves de la Instalación de Vuelo Wallops en Virginia, proporcionó apoyo aéreo para una exitosa prueba de lanzamiento de paracaídas de tripulación comercial el 9 de enero en el Yuma Proving Ground del Ejército de los EE.UU., Arizona. Las pruebas de esta semana se realizaron en apoyo del Programa de Tripulación Comercial de la NASA y su socio, Boeing, que están desarrollando la capacidad de transporte de tripulación hacia y desde la Estación Espacial Internacional.

Se probó un sistema de paracaídas modificado para la nave espacial Starliner de Boeing. El sistema, que incluía dos paracaídas de cola anular, requería una demostración en condiciones de tensión para certificar el éxito del despliegue.

Durante la demostración, el equipo del C-130 de Wallops desplegó una carga útil de 27.000 libras compuesta por el vehículo de prueba de lanzamiento desde el compartimento del paracaídas y el sistema de despliegue a media altitud. El equipo soltó la carga útil desde una altitud de 13.000 pies mientras coordinaba y sincronizaba sus esfuerzos con los UH-60 del Ejército de EE.UU. y un avión B-200 de la AFRC de la NASA utilizado para capturar fotos y documentación en vídeo de la misión.

NASA/Enero 12 de 2024

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