La encuesta exhaustiva de datos de inteligencia y monitoreo de áreas de interés, son algunas de las actividades realizadas por la Aviación de Reconocimiento de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB), que celebra su fecha el 24 de junio. A bordo de aeronaves con sensores y radares de última generación, los Escuadrones de Poker (1º / 10º GAV), Horus (1º / 12º GAV), Carcará (1º / 6º GAV) y Guardian (2º / 6º GAV), ubicados estratégicamente en Santa María (RS) y Anápolis (GO), son los ojos de la FAB que, desde arriba, comparten el desafío de detectar amenazas, así como proteger e integrar el territorio nacional.
Escenario actual
En 2017, con la reestructuración operativa de la FAB, surgió un nuevo concepto doctrinal: el IVR: aplicación integrada de inteligencia, vigilancia y reconocimiento, tanto en el período normal como en situaciones de conflicto regular e irregular. Los aviones E-99 se usan diariamente en misiones de control de vuelo y alarma. Mientras que las aeronaves pilotadas a distancia (ARP) RQ-450 y RQ-900, las R-99, R-35 A / AM y RA-1 llevan a cabo varias misiones de reconocimiento aéreo. Los ARP también se destacan en las actividades de vigilancia, principalmente en operaciones conjuntas. Además, los RA-1 son responsables del reconocimiento táctico.
De acuerdo con l comandante de la escuadra «Póker», teniente coronel aviador Agnaldo dos Santos, «El reconocimiento táctico es la técnica que permite ingresar al territorio enemigo y capturar la información necesaria para la Fuerza, cuando hay una situación de conflicto», explicó.
En el contexto nacional, Reconnaissance Aviation se divide en dos grandes grupos de acciones que contribuyen al cumplimiento de la misión de la FAB: las que ayudan a mantener la soberanía del espacio aéreo y las que colaboran para la integración del territorio nacional.
Soberanía del espacio aéreo
Según explicó el Comandante del Escuadrón Carcará, el Teniente Coronel Aviador Bruno Gadelha Pereira, centrado en mantener la soberanía del espacio aéreo, «la actividad principal de Reconnaissance Aviation es generar productos de inteligencia para ayudar en la toma de decisiones, ya sea a nivel táctico o operacional a corto plazo; o estratégico y político, a medio y largo plazo”, dice.
Control de vuelo y alarma (CAV) y estación de comunicación aérea (P Com-Ar) también contribuyen a mantener la soberanía del espacio aéreo, así como IVR, con la aplicación de Inteligencia de Señales ( SIGINT), Inteligencia Electrónica ( Inteligencia Electrónica – ELINT) e Inteligencia de Imagen ( Inteligencia de Imágenes – IMINT), tan esencial en el proceso de toma de decisiones, en caso de conflicto.
Integración del territorio nacional
En cuanto a la integración del territorio nacional, el Reconocimiento contribuye con imágenes que se utilizan en diferentes situaciones, tales como monitoreo y análisis de: invasión fronteriza, crecimiento de ciudades, modelo digital de superficie, cursos de ríos, incendios, deforestación, pistas clandestinas, garimpos (campamentos clandestinos), entre otros.
También hay vigilancia aérea, que es de fundamental importancia para eventos como los Juegos Olímpicos, la Copa del Mundo y otras operaciones interinstitucionales, como la Ley y la Garantía del Orden (GLO) y muchos otros de importancia nacional. «La discreción de un ARP en la vigilancia no tiene paralelo, lo que demuestra una vocación natural para las operaciones de inteligencia», explica el Comandante del Escuadrón Horus, Teniente Coronel Aviador Daniel Lames de Araujo.
Desde los primeros días hasta la actualidad.
Años antes del primer despegue de un avión, el 14-Bis, en 1906, el hombre ya usó la altitud como un aliado para obtener información de los oponentes durante los conflictos. En 1867, Duque de Caxias utilizó frágiles globos aerostáticos para recopilar datos sobre el enemigo durante la Guerra paraguaya: fueron los inicios de Reconnaissance Aviation, que hoy, además de sus propios ojos, utiliza sensores de última generación y aviones modernos. para identificar objetivos en profundidad.
Modernización
Actualmente, el avión E-99 se somete a un proceso de modernización administrado por el Comité Coordinador del Programa de Aviones de Combate (COPAC). El procedimiento apunta a mejorar el radar e implementar nuevos sistemas de Comando y Control. “El nuevo sistema traerá mayor precisión, confiabilidad y velocidad en la identificación y alerta temprana de aeronaves sospechosas. El R-99, por otro lado, está pasando por un proceso de revitalización de los sensores, con su radar de apertura sintética completamente recuperado y, además, sus viejas cámaras reemplazadas”, dijo el Comandante del Escuadrón Guardián, Teniente Coronel Aviador Felipe Francisco Espinha.
Fuerza Aérea de Brasil/Junio 24 de 2020