Los dos primeros aviones MQ-9 llegaron a Rumanía anteanoche. El último avión llegará en breve. Las aeronaves no tripuladas se utilizarán en breve para recabar información en el flanco oriental de la OTAN. La alianza utilizará la información en su defensa. Los drones realizarán vuelos desde la base aérea rumana de Câmpia Turzii. Ingenieros del ejército construirán allí un campamento en próximos días. Además, se preparará la aeronave para su despliegue. El control de la aeronave no tripulada se realizará desde la base aérea de Leeuwarden. Allí también se procesará la información recopilada.
La aeronave operará sobre tierra y mar. La información recopilada dará a Holanda una mejor posición de información independiente y le permitirá compartir información con la OTAN a petición de ésta. Esto es importante para la posible defensa de la zona fronteriza.
Operaciones antidroga
Los Países Bajos habían estacionado anteriormente los Reaper en Curaçao. Allí, los aviones se utilizaban para el entrenamiento y la preparación del personal de las fuerzas aéreas. También se han utilizado en operaciones antidroga. En total, las aeronaves no tripuladas han registrado más de 2.800 horas de vuelo en la isla y sus alrededores. Desde la isla caribeña, los aparatos fueron trasladados a Rumanía en aviones de transporte.
Tras la salida de los MQ-9, permanece activo un DASH-8 de la Guardia Costera del Caribe. Esta aeronave realiza patrullas marítimas en la zona.
Ministerio de Defensa de los Países Bajos/Enero 29 de 2024