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Los buques de guerra de la OTAN se han unido al HMS Prince of Wales para el inicio de unas maniobras frente a las costas del Reino Unido

Tiempo de lectura: 2 minutos
©Royal Navy

El portaaviones y su fuerza operativa practicaron la navegación en formación cerrada y aprendieron cómo operan las distintas armadas al iniciar la operación Joint Warrior, que pone a prueba la preparación del Carrier Strike Group del Reino Unido y su capacidad para disuadir amenazas.

La fragata HMS Portland de la Marina Real Británica y los petroleros RFA Tideforce y Tidespring se unieron al Prince of Wales la semana pasada y sus efectivos se vieron reforzados por la fragata HMCS Charlottetown de la Marina Real Canadiense de clase Halifax; la fragata de defensa aérea SNS Cristóbal Colón de la Marina Española de clase Álvaro de Bazán y la fragata HMDS Niels Juel de la Marina Danesa de clase Iver Huitfeldt.

Las estrechas maniobras pusieron a prueba a los oficiales de navegación y a los equipos de puente de todos los buques participantes, que tuvieron que superar barreras lingüísticas y navegar en formación cerrada con buques de diversos tamaños.

El HMS Prince of Wales está ahora bajo mando de la OTAN por primera vez desde 2022.

Su navegante, el capitán de corbeta Tom Parsons, declaró: «Reunir buques de guerra de diferentes países siempre es un desafío agradable, especialmente cuando maniobramos tan estrechamente como lo hemos hecho hoy».

Aunque en el día a día hablemos idiomas diferentes, hoy hemos demostrado que no existe ninguna barrera para operar como un único Carrier Strike Group».

«Mi equipo de puente y yo estamos deseando que lleguen las próximas semanas para conocer mejor a nuestros aliados de la OTAN mientras afrontamos codo con codo unos ejercicios cada vez más exigentes».

Joint Warrior es uno de los aspectos del mayor ejercicio de la OTAN en una generación, el ejercicio Steadfast Defender, en el que decenas de países trabajarán juntos en Escandinavia y el norte de Europa, demostrando la determinación, unidad y capacidad de la OTAN.

Mientras el Carrier Strike Group del Reino Unido opera en el mar, los Royal Marines han vuelto a desplegarse en Noruega para poner a prueba su capacidad de lucha y defensa en uno de los entornos más duros de la Tierra.

El Capitán John Cromie, Comandante Adjunto y Jefe de Estado Mayor del Grupo de Ataque de Portaaviones del Reino Unido, declaró: «A principios de esta semana, vimos llegar la principal capacidad de ‘ataque’ de la fuerza con el embarque de nuestros F-35B.

«Hoy hemos visto reunirse a los elementos internacionales del ‘grupo’, con cuatro buques de aliados de la OTAN que se han unido a las dos unidades británicas que ya escoltaban al HMS Prince of Wales. Un portaaviones no puede operar eficazmente sin la protección de escoltas o el apoyo logístico proporcionado por auxiliares.

«El hecho de que nuestra Agrupación de Ataque de Portaaviones incluya ahora buques de cuatro países de la OTAN demuestra el nivel de unidad, interoperatividad y determinación que existe en toda la Alianza.

«Ahora estamos preparados para comenzar el Ejercicio Joint Warrior, un ejercicio marítimo que no es sino una parte de Steadfast Defender, y mediante el cual demostraremos a cualquier adversario potencial nuestra absoluta determinación de defendernos a nosotros mismos y a nuestros aliados».

Royal Navy/Febrero 26 de 2024

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