La Fuerza Expedicionaria Conjunta (JEF-Joint Expeditionary Force) llevó a cabo una gran actividad integrada de defensa aérea en el Alto Norte y el Atlántico Norte, en la que participaron siete naciones de la JEF el 29 de febrero de 2024.
Bajo la coordinación del Centro de Operaciones Aéreas Combinadas (CAOC-Combined Air Operations Centre) de la OTAN en Uedem (Alemania), la JEF trabajó con bombarderos estratégicos de largo alcance de la Fuerza Aérea de Estados Unidos (USAF), que regresaban a su base de origen en Estados Unidos, para simular la interceptación de aviones adversarios. Mientras los bombarderos se dirigían hacia el sur por la costa noruega, aviones de Alerta de Reacción Rápida (QRA) terrestres y basados en portaaviones se desplegaron sucesivamente para interceptarlos, demostrando la capacidad del JEF para defender los cielos del flanco norte de la OTAN.
«La capacidad de convocatoria del cuartel general operativo de la JEF permite a los países del norte de Europa participar en actividades como Global Guardian con los Aliados, lo que refuerza aún más nuestra capacidad colectiva», declaró el Director de Comunicaciones de la JEF, Capitán de Grupo Kevin Latchman. «La participación de las naciones de la JEF en la defensa aérea pone de relieve los esfuerzos colectivos de la JEF para disuadir a cualquier posible adversario, al tiempo que contribuye a la actividad de vigilancia reforzada de la OTAN en la región», añadió.
Global Guardian fue una actividad coordinada con Steadfast Defender 24, el mayor ejercicio de la OTAN en una generación. Incluía el seguimiento de los aviones por parte de los grupos de trabajo marítimos de la OTAN y la interceptación por parte de aviones F-35 Lightning basados en el HMS Prince of Wales.
«Ejercicios como este son vitales para la formación de los pilotos de los F-35, los ingenieros y todos los que participan a bordo del portaaviones, ya que representan una demanda muy realista para hacer despegar nuestros aviones con sólo unos minutos de antelación», dijo el comodoro James Blackmore, de la Royal Navy, comandante del UK Carrier Strike Group a bordo del HMS Prince of Wales. «También sirven para demostrar la rapidez de reacción de las Fuerzas Armadas del Reino Unido en caso de incidente», añadió.
«Desde nuestra perspectiva a flote, demuestra la flexibilidad que la capacidad de ataque de los portaaviones aporta a la defensa británica y aliada», declaró el comodoro James Blackmore. «Somos capaces de actuar como un aeródromo móvil, desplazándonos hasta 500 millas al día, situándonos donde sea necesario para lanzar nuestros reactores a cualquier hora del día o de la noche para llevar a cabo interceptaciones como éstas», añadió.
Los ejercicios de Global Guardian fueron una oportunidad para trabajar directamente con colegas de las fuerzas aéreas con base en bases aéreas del Reino Unido y de otros Aliados mientras el Carrier Strike Group transita hacia el norte para continuar las operaciones combinadas multidominio con fuerzas durante el Steadfast Defender 24 de la OTAN.
El Cuartel General Operativo de la JEF, en Londres, contribuyó a la planificación y coordinación de la actividad junto con diversos cuarteles generales en Europa y Norteamérica. Esta salida de entrenamiento formaba parte de las actividades regulares de entrenamiento de la RAF con la Fuerza Aérea de EE.UU. y los Aliados de la OTAN, integradas en el despliegue rutinario de aviones de la US Bomber Task Force en Europa.
Incluía entrenamiento de integración e interoperabilidad con medios QRA de seis de las diez naciones participantes en el JEF: Dinamarca, Finlandia, Reino Unido, Noruega, Países Bajos y Suecia, con inteligencia, vigilancia, adquisición de objetivos y reconocimiento (ISTAR) y Búsqueda y Rescate (SAR) también proporcionados por Islandia, país participante en el JEF.
OTAN/Marzo 04 de 2024
