La Comisión Europea ha anunciado hoy su decisión sobre el futuro del aeropuerto de Schiphol. En esta decisión, la Comisión Europea plantea varias preocupaciones sobre el paquete presentado destinado a reducir la contaminación acústica para los residentes en los alrededores de Schiphol. De esta decisión se desprende claramente que la reducción de la capacidad del aeropuerto de Schiphol no debe ser el objetivo en sí mismo. La atención debe centrarse en alcanzar los objetivos de reducción de ruido del Gobierno, que KLM apoya. En el programa «Más limpio, más silencioso, más eficiente», KLM está tomando medidas para lograr este objetivo. La decisión indica que estas medidas deben estudiarse mejor.
La Comisión Europea afirma en sus recomendaciones que la nueva flota, en la que KLM está invirtiendo miles de millones, contribuye a alcanzar el objetivo de reducción del ruido y, por tanto, debe incluirse. Esto significa que una reducción de tamaño es innecesaria. Además, la Comisión afirma que no se ha tenido debidamente en cuenta el impacto de las medidas operativas y de la aviación general.
Esperamos que el Ministerio de Infraestructuras y Gestión del Agua se tome a pecho la decisión de la Comisión Europea y siga las recomendaciones antes de aplicar restricciones de capacidad. De este modo, el sector conserva una perspectiva de futuro al tiempo que mantiene un equilibrio con el medio ambiente, manteniendo a los Países Bajos conectados con el resto del mundo.
Gracias a su amplia red de destinos aéreos, Holanda es uno de los países mejor conectados del mundo. Esto es crucial, ya que nuestra economía depende del comercio internacional. Las medidas nacionales repercuten directamente en la posición de KLM y de los Países Bajos, sobre todo ahora que los países vecinos de Europa están debatiendo la ampliación de sus aeropuertos. Lo que ahora se desmantela no se puede recuperar.
KLM/Marzo 05 de 2025
