Cada semana, más de un millón de personas vuelan desde Schiphol a sus destinos de vacaciones, trabajo, estudio o visita familiar. KLM desempeña un papel importante en todo esto. Nuestra red, cuidadosamente construida, convierte a los Países Bajos en uno de los centros económicos y culturales mejor conectados del mundo, con un clima empresarial favorable para organizaciones, empresas e institutos científicos internacionales.
KLM hace suyos los objetivos de reducción de las molestias acústicas para los residentes de los alrededores de Schiphol. Por ello, estamos invirtiendo 7.000 millones de euros en aviones más silenciosos y hemos propuesto importantes medidas en el plan Cleaner, Quieter, More Efficient. Esto demuestra que no es necesario un Schiphol más pequeño para alcanzar los objetivos de ruido. KLM considera incomprensible que el Consejo de Ministros aún pretenda reducir a 478.000 los movimientos de aviones.
Limitar el número de vuelos conlleva además un riesgo importante de medidas de represalia por parte de otros países, que no sólo afectarán a la aviación, sino también a otras empresas holandesas.
Tenemos serias dudas sobre los supuestos en los que el ministerio ha basado esta cifra. El proceso de toma de decisiones no cumple los requisitos de un cuidadoso procedimiento de Enfoque Equilibrado, en el que la consecución del objetivo político perseguido es fundamental: la reducción del ruido. La reducción de los movimientos de vuelos no es un fin en sí mismo y se prevé que sea jurídicamente insostenible. Esperamos el dictamen de la Comisión Europea.
La aviación siempre desempeñará un papel en nuestras vidas si queremos explorar el mundo, hacer negocios y visitar a la familia. Si los Países Bajos se quedan sin un Schiphol bien conectado, estaremos dando pasos gigantescos hacia atrás en el tiempo. Por eso es tan importante que esta decisión se tome sobre las bases adecuadas.
KLM/Diciembre 06 de 2024