Por primera vez como miembro de la OTAN, reactores suecos JAS-39 Gripen despegaron bajo acuerdos de la OTAN para salvaguardar los cielos del Mar Báltico volando con aviones de alerta de reacción rápida alemanes y belgas.
En la mañana del 11 de marzo, los operadores de radar aliados detectaron un rastro no identificado sobre el mar Báltico que se dirigía de Kaliningrado a la Rusia continental; los controladores del CAOC de la OTAN en Uedem coordinaron posteriormente el lanzamiento de aviones de combate suecos de la OTAN desde Suecia y ordenaron el lanzamiento de aviones de combate F-16 belgas desde la base aérea de Šiauliai (Lituania). Ambos Aliados identificaron visualmente un Tu-134 ruso que no estaba en plan de vuelo.
Más tarde ese mismo día, apareció en las pantallas de radar de la OTAN otra pista de un An-26 ruso y el CAOC alertó a los Interceptores de Alerta de Reacción Rápida alemanes en Lielvarde para que se lanzaran y establecieran más detalles de la pista. Los jets suecos JAS-39 Gripen también fueron lanzados y ambos Aliados realizaron una identificación visual de un avión militar ruso tipo An-26 y escoltaron al avión.
Esta misión estaba completada cuando a los suecos y alemanes se les asignó otra tarea que implicaba otro procedimiento de identificación del Tu-134 ruso.
Tras llevar a cabo con profesionalidad estas misiones rutinarias de identificación visual, los reactores de la OTAN procedentes de Bélgica, Alemania y Suecia regresaron a sus bases.
Esta primera misión en el mundo real del Gripen sueco se produjo sólo unos días después de convertirse en miembro de la OTAN. Es una impresionante demostración de la profunda integración que la Fuerza Aérea Sueca ha logrado con las fuerzas de policía aérea de la OTAN y de la estrecha y fluida interoperabilidad en apoyo de la salvaguarda de la OTAN sobre el Mar Báltico.
Los cazas aliados surcan regularmente los cielos para interceptar e identificar aviones rusos que vuelan en el espacio aéreo internacional cerca del territorio de la OTAN. Como medida de precaución, el mando y control de la OTAN lanza cazas para identificar a estos aviones y seguir su trayectoria de vuelo mientras operan cerca del territorio de los Aliados o sobre operaciones de la Alianza. Para los alemanes este scramble ha sido el segundo desde que se hicieron cargo de la misión de Policía Aérea en Lielvarde el 1 de marzo, mientras que los jets belgas han sido scramble aproximadamente una docena de veces desde que comenzaron su misión en Šiauliai el 1 de diciembre de 2023.
OTAN/Marzo 11 de 2024