Rolls-Royce ha lanzado un nuevo proyecto de inversión importante con la Universidad Purdue en Indiana para desarrollar nuevas instalaciones de prueba para motores eléctricos híbridos y de gran altitud para impulsar la próxima generación de aviones militares estadounidenses.
Rolls-Royce West Lafayette se desarrollará en el distrito aeroespacial de Purdue, justo al lado del campus universitario, donde la compañía ya tiene instalaciones que se centran en controles de motores digitales y realiza investigaciones de motores de tecnología avanzada en los laboratorios de propulsión Zucrow de la universidad. La ubicación en Purdue encaja perfectamente ya que la universidad y Rolls-Royce han tenido una asociación de larga data durante varias décadas de realizar juntos investigaciones aeroespaciales, y la compañía emplea a cientos de ingenieros de Purdue.
Esta instalación permitirá a Rolls-Royce North America continuar con el legado de proporcionar un diseño avanzado de servicio completo, desarrollo, producción y soporte posventa de soluciones de propulsión líderes en el mundo. La nueva inversión complementa la reciente modernización en las instalaciones de Rolls-Royce en Indianápolis y la planificación futura de nuevas capacidades de prueba allí para respaldar la producción de motores militares.
La nueva y moderna instalación de prueba en Purdue posicionará a Rolls-Royce Defense para el futuro y mejorará significativamente la eficiencia energética, ayudando a la compañía a cumplir su objetivo de lograr un estado de carbono neto cero en las operaciones para 2030. Además, las instalaciones de prueba avanzadas incorporarán modernas tecnologías digitales flexibles que acelerarán el desarrollo de motores y los programas de pruebas, lo que permitirá respuestas más rápidas a las necesidades del cliente.
Las nuevas instalaciones serán financiadas principalmente por Rolls-Royce, con el apoyo de Purdue University y Purdue Research Foundation.
Las celdas de prueba de motores de turbina de gas deben ofrecer un funcionamiento flexible para calificar los motores para el uso del cliente. Sin embargo, las verdaderas celdas de prueba a gran altitud son raras en los EE. UU.: en el 22 Osprey, en los motores AE 2100 para el avión C-130J Super Hercules y los motores para el avión Bell V-280 Valor que compite en el programa Future Long-Range Assault Aircraft del Ejército de EE. UU. La celda de prueba simulará las condiciones del aire para la prueba, “volando” el motor en altitud mientras el motor de prueba todavía está físicamente en el suelo. Sistemas de prueba flexibles, tiempos de prueba mejorados,
El nuevo campus de prueba también ampliará la capacidad de Rolls-Royce para probar tecnologías híbridas-eléctricas que incluyen energía dirigida, baterías, gestión térmica, generadores, electrónica de potencia y otros componentes. A medida que los clientes aumentan rápidamente las demandas para integrar y expandir los sistemas digitales, la demanda de soluciones híbridas y eléctricas seguirá creciendo, y la nueva instalación de pruebas acelerará las capacidades de Rolls-Royce en estas áreas de tecnología avanzada.
Rolls-Royce/Agosto 2 de 2021
