Como parte de su asociación estratégica para promover la aviación sostenible, Boeing y Etihad Airways probaron tecnologías que se enfocan en reducir las emisiones y el ruido como parte del programa ecoDemonstrator 2020. Este programa utiliza aviones comerciales para probar tecnologías que pueden hacer que la aviación sea más segura y sostenible ahora y en el futuro.
Se realizaron mediciones de sonido en el Boeing 787-10 y en tierra para validar los procesos de predicción de ruido de la comunidad y el potencial de reducción de sonido de un tren de aterrizaje modificado para operaciones más silenciosas. Unos 1,200 micrófonos colocados en el exterior de la aeronave y colocados en el suelo recogieron estas medidas. Las pruebas en el ecoDemonstrator validarán la eficacia de las posibles soluciones de diseño para la próxima generación de trenes de aterrizaje.
Safran Landing Systems, que suministra el tren de aterrizaje para el 787 Dreamliner, equipó el ecoDemonstrator 2020 con dispositivos de reducción de ruido del tren de aterrizaje. Estos dispositivos están conectados estratégicamente a las áreas del tren de aterrizaje que se ha demostrado que producen un mayor ruido debido al flujo de aire cuando un avión vuela bajo antes de aterrizar. El propósito de estos dispositivos es crear una barrera física que difunda el flujo de aire, reduciendo así el ruido que se puede escuchar desde el suelo.
El objetivo es atenuar la contribución acústica del tren de aterrizaje en más de un 20%. Los motores de aviones modernos han reducido su firma de ruido y ahora se están haciendo esfuerzos para reducir el ruido del tren de aterrizaje. Al final del programa de pruebas de vuelo, Boeing entregará el 787-10 a Etihad a finales de septiembre.
Safran/Septiembre 10 de 2020