En una medida que contribuye de forma sostenible a la protección del clima y del medio ambiente, Fraport y Lufthansa se han unido para transferir las botellas de PET reciclables directamente desde el avión a un circuito de reciclaje sostenible y cerrado. El aeropuerto de Fráncfort es el primer aeropuerto de Europa que participa en este proceso. PET (tereftalato de polietileno) es el nombre de un plástico transparente, fuerte, ligero y 100% reciclable. Lufthansa y Fraport, junto con Hassia Mineralquellen, una empresa que comercializa algunas de las mejores aguas minerales de Alemania, probaron intensamente un proyecto de reciclaje de bucle cerrado a finales de 2021 y, una vez concluido con éxito, lo trasladaron inmediatamente al funcionamiento regular en Fráncfort.
Las botellas se reciclan al 100%
Alrededor del 60% del peso de los residuos de un avión corresponde a las botellas de PET devueltas y su contenido. Estas botellas se recogen por separado, tras el aterrizaje, y se entregan a Hassia Mineralquellen, que integra las botellas en su propio proceso de reciclaje. El granulado de PET recuperado se utiliza para fabricar nuevas botellas vírgenes, que se vuelven a llenar con bebidas. Esto significa que las botellas de PET recogidas se reciclan al 100%.
Basándose en el actual volumen de tráfico aéreo de Lufthansa, se espera que sólo este año se puedan recoger unos cuatro millones de botellas de PET con un peso de 72 toneladas. Basándose en los movimientos de los vuelos y el factor de carga para 2019, los socios del proyecto podrían recoger hasta 10 millones de botellas de PET al año en el futuro.
Lufthansa/Febrero 17 de 2022