Este año, el 24 de febrero, hace exactamente 40 años, una tripulación multinacional aterrizó el primero de los dieciocho aviones E-3A de la OTAN de Alerta y Control Temprano (AWACS) en la Base Aérea de la OTAN de Geilenkirchen. Este momento histórico marcó un hito para la Fuerza de Control y Alerta Temprana Aerotransportada de la OTAN (NAEW&CF) y para la Alianza. Desde 1982, la NAEW&CF ha proporcionado vigilancia aérea y conocimiento de la situación y ha suministrado mando y control aerotransportado a los aliados de la OTAN, garantizando la integridad y seguridad del espacio aéreo de la OTAN.
En las últimas cuatro décadas, los E-3A AWACS de la OTAN han llevado a cabo una amplia gama de misiones, desde la vigilancia aérea en tiempos de paz hasta el apoyo a la lucha contra el terrorismo, pasando por operaciones de evacuación, ayuda humanitaria y misiones de respuesta a las crisis. Desde el apoyo activo a las operaciones aéreas ofensivas de la OTAN contra el régimen de la antigua Yugoslavia hasta el despliegue en los Estados Unidos de América tras los ataques terroristas del 11-S, pasando por el apoyo actual a la organización contra el terrorismo del Estado Islámico, los AWACS de la OTAN han participado continuamente en el mantenimiento de la paz y la seguridad en todo el mundo.
El componente E-3A ocupa un lugar único en la historia militar de la OTAN, ya que es la primera unidad de vuelo operativa multinacional establecida por la Alianza, con la participación de 20 países miembros de la OTAN en el programa. Su misión permanente es llevar a cabo tareas de vigilancia aérea y de gestión de la batalla, por orden del Comandante de la Fuerza NAEW&C, en nombre del Comandante Supremo Aliado en Europa, según lo dispuesto por el Consejo del Atlántico Norte, la más alta institución de liderazgo de la OTAN.
OTAN/Febrero 23 de 2022