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Miembros del Ala de Ataque 174 viajan en un C-130 por primera vez

Tiempo de lectura: 2 minutos
Personal del Ala de Ataque 174 escuchan las instrucciones durante un viaje en un C-130. El vuelo pretendía simular un vuelo a otro país y forma parte de un ejercicio de preparación para el despliegue de una semana de duración. Foto de la Guardia Nacional Aérea de EE.UU. por el sargento de personal Duane Morgan

Los miembros del Ala de Ataque 174 (ATKW) viajaron en un C-130 durante un ejercicio de entrenamiento, el 29 de abril de 2022, en la base de la Guardia Nacional Aérea de Hancock Field. El ejercicio de entrenamiento del 174º ATKW forma parte del entrenamiento de preparación y prepara a los aviadores para que estén listos para la misión si fueran desplegados.

El C-130 es un avión de transporte militar cuatrimotor. Fue diseñado y construido por Lockheed, y originalmente fue diseñado como avión de transporte de tropas, de evacuación médica y de carga. Lockheed Martin comenzó a producir C-130 en 1954, el primer C-130 en servicio militar fue en 1956, y los C-130 se siguen produciendo hoy en día.

Para muchos de los miembros que iban a bordo del avión, ésta era la primera vez que volaban en un C-130. El vuelo culminó una larga jornada de preparación por la que tuvieron que pasar todos los que subieron al avión. Todos los miembros participaron en el ejercicio pasando por una línea de predespliegue, que consistió en una mañana llena de sesiones informativas, rellenando papeleo y entregando documentación para asegurarse de que cada miembro está preparado para la misión en caso necesario. Muchos de los miembros mencionaron que el vuelo del C-130 fue la parte más emocionante del día después de la monotonía de la mañana.

«Me pareció estupendo», dijo Xavier Comstock, aviador del Escuadrón de Apoyo a la Fuerza. «Realmente no tienes la oportunidad de volar en un avión como ese fuera del ejército. Me sentí bien al tener la oportunidad de volar por ahí».

Muchos de los pasajeros tenían diferentes cosas que les gustaban del vuelo.

«Personalmente, mi parte favorita del vuelo fue subir a la cabina con los pilotos», dijo Espoir Kibingira, aviador del Escuadrón de Apoyo a la Fuerza. «Fue muy divertido ver cómo los pilotos pilotan el avión».

Cuando se les pidió que explicaran su experiencia a bordo del C-130 en una palabra, Comstock eligió «diferente».

«Porque estar en un C-130 te da una sensación completamente diferente a la de estar en un avión comercial. En un C-130 se respira una atmósfera que no se puede conseguir en un avión comercial», dijo Comstock.

Kibingira eligió la palabra «fenomenal».

«Tienes la oportunidad de ver lo que hacen los pilotos. También tienes la oportunidad de ver cómo se almacena la carga en los palés de la parte trasera del avión. Es básicamente como tener tu propio tour del avión en cualquier momento», dijo Kibingira.

ANG/Hancock Air National Guard Base, NY. Mayo 04 de 2022

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