Esta semana, varios Rafale aterrizaron en la BA 120 de Cazaux y en la BA 106 de Burdeos-Mérignac, mientras que inicialmente debían hacerlo en la BA 118 de Mont-de-Marsan. Esta dispersión ha permitido formar a las tripulaciones y, más ampliamente, a las bases aéreas en el concepto MORANE (aplicación reactiva del arma aérea).
El concepto operacional MORANE es un proyecto desafiante para la Fuerza Aérea y Espacial francesa (AAE), que revoluciona las prácticas de trabajo que han estado en vigor durante décadas», explica el Coronel Frédéric, Director del Ejercicio «Volfa» 24. Su objetivo es garantizar la libertad de acción del AAE, manteniendo al mismo tiempo su capacidad de reacción al más alto nivel, gracias a las cualidades intrínsecas del poder aéreo: capacidad de reacción, ubicuidad, velocidad del rayo». El objetivo del concepto MORANE es permitir al Ejército del Aire y a la Agencia Espacial desplegarse con la menor huella logística posible, en plazos muy breves, con capacidad de reacción y agilidad. Un concepto que tiene su lugar en el gran ejercicio del Ejército del Aire. El objetivo es concienciar a todos los aviadores de la importancia de estos conceptos, sobre todo cuando se enfrentan a situaciones imprevistas de corto plazo. El coronel Frédéric prosigue: «La puesta en práctica de MORANE exige un verdadero cambio de mentalidad a todos los niveles, en particular a nivel táctico, razón por la cual este concepto se ha introducido dentro del Ejercicio «Volfa» 24, como parte de la preparación para el combate de alta intensidad.»
Aunque esté preparada al milímetro, una operación aérea puede dar lugar a situaciones imprevistas. Este fue el caso esta semana del capitán Cyril, piloto de Rafale del 30º Ala de Caza. Despegamos de Mont-de-Marsan para proteger a otros Rafale y Mirage 2000D encargados de entregar SCALP detrás de las líneas enemigas», explica mientras baja de su avión. Cuando terminó la misión, nos enteramos en vuelo de que era probable que se produjera un ataque contra el BA 118. Tuvimos que adaptarnos a la situación. Tuvimos que adaptarnos a esta situación, desviarnos y volver a poner los aviones en acción para que estuvieran listos lo antes posible para la siguiente oleada del ejercicio».
La formación de las tripulaciones del concepto MORANE también se basa en una gestión logística eficaz. El Ejército del Aire francés puede recurrir a todas sus bases militares para garantizar una formación eficaz en condiciones reales, tanto para las tripulaciones de vuelo como para los mecánicos y otros aviadores. «La dispersión forma parte de nuestros procedimientos, y eso significa proporcionar apoyo desde la base de acogida para garantizar que estamos alimentados, alojados y en condiciones de prepararnos para la misión del día siguiente», explica el capitán Cyril. La simulación de diversos escenarios durante la «Volfa» permite a las tripulaciones desarrollar sus capacidades de toma de decisiones y gestión de crisis en un entorno controlado. Al incorporar este entrenamiento específico, el Ejército del Aire francés refuerza la preparación de sus aviadores y aviadoras para hacer frente a las nuevas amenazas.
Armée de l’Air et de l’Espace/Marzo 29 de 2024