Embraer acoge con satisfacción las decisiones del gobierno brasileño de retirar su disputa en curso de la Organización Mundial del Comercio (OMC) con Canadá con respecto a los subsidios aeronáuticos y de iniciar negociaciones sobre disciplinas más efectivas para regular el apoyo gubernamental en el segmento de la aviación comercial. En la OMC, Brasil impugnó más de USD 3 mil millones en subsidios ilegales que los gobiernos de Canadá y Quebec proporcionaron a Bombardier para el lanzamiento, desarrollo y producción del programa C-Series. Estos subsidios distorsionaron las condiciones de competencia en el mercado global de aviones comerciales, causando un grave perjuicio a Embraer, en clara violación de las reglas de la OMC. Aunque Brasil tiene un caso sólido, la disputa de la OMC se volvió ineficaz para abordar las subvenciones canadienses y remediar las distorsiones generadas en el mercado. Después de que Bombardier abandonó el segmento de aviación comercial y transfirió el programa C-Series (ahora llamado A220) a Airbus, que tiene una segunda línea de ensamblaje en los Estados Unidos, la disputa comercial contra Canadá en la OMC ya no es el medio más efectivo para lograrlo. El objetivo de Brasil y Embraer de restablecer la igualdad de condiciones en este sector. Embraer también apoya la iniciativa de Brasil de lanzar negociaciones para disciplinas más efectivas sobre el apoyo gubernamental en el segmento de la aviación comercial, como la mejor manera de lograr este objetivo, como se vio anteriormente con la exitosa experiencia del Entendimiento del Sector Aeronáutico (ASU) de la OCDE, firmado en 2007. Por último, Embraer cree que los fabricantes de aviones comerciales deben competir entre sí basándose en los méritos de su producto, no en la cantidad de fondos que reciben de sus gobiernos.
Embraer/São Paulo, Brasil. Febrero 18 de 2021