Un vuelo de prueba sin tripulación de la nueva generación de naves espaciales Starship de SpaceX explotó minutos después del despegue desde el sur de Texas el jueves, cortando un paso clave en el desarrollo de Elon Musk de una nave cohete para llevar eventualmente a los seres humanos a la Luna y Marte.
El vuelo de prueba fue el primero de la Starship, montada sobre el nuevo cohete acelerador Super Heavy de la empresa, que SpaceX ha promocionado como el más potente del mundo.
Aunque el cohete de dos etapas no consiguió superar una altitud de 23 millas (37 km), el vuelo logró el objetivo principal de hacer despegar la nueva nave espacial en un despegue que, por lo demás, parecía limpio.
Aunque los responsables de SpaceX se mostraron alentados por el resultado, la misión no alcanzó varios de sus objetivos.
El plan consistía en desplegar la Starship en el espacio y hacerla reentrar en la atmósfera terrestre a 97 km de una costa hawaiana antes de precipitarse en el Pacífico. Pero la explosión truncó la misión.
Musk, fundador, director ejecutivo e ingeniero jefe de SpaceX, parecía dispuesto a moderar las expectativas en unas declaraciones realizadas el domingo en las que restó importancia a las probabilidades de éxito del primer vuelo. El presidente de SpaceX, Gwynne Shotwell, dijo en una conferencia en febrero que el «verdadero objetivo» de la prueba «es no volar la plataforma de lanzamiento».
Hacer despegar por primera vez la recién combinada Starship y el cohete propulsor representó un hito en la ambición de SpaceX de enviar astronautas a la Luna y, en última instancia, a Marte, como socio principal de Artemis, el recién inaugurado programa de vuelos espaciales tripulados de la NASA.
«¡Felicidades a @SpaceX por la primera prueba de vuelo integrado de Starship!», dijo en un tuit el jefe de la NASA, Bill Nelson. «Cada gran logro a lo largo de la historia ha exigido cierto nivel de riesgo calculado, porque con un gran riesgo viene una gran recompensa. Esperando con interés todo lo que SpaceX aprenda, hasta la próxima prueba de vuelo – y más allá.»
El cohete de dos etapas, 120 metros más alto que la Estatua de la Libertad, despegó del puerto espacial Starbase de la empresa, al este de Brownsville (Texas). SpaceX esperaba, en el mejor de los casos, realizar un vuelo de debut de 90 minutos al espacio, pero sin llegar a la órbita terrestre.
Una retransmisión en directo de SpaceX mostró cómo el cohete se elevaba desde la torre de lanzamiento de la Costa del Golfo hacia el cielo matutino sobre el extremo sur de Texas, mientras los motores Raptor del Super Heavy rugían en una bola de llamas y nubes de gases de escape y vapor de agua.
Pero menos de cuatro minutos después de iniciado el vuelo, la etapa superior de la Starship no logró separarse de la inferior del Super Heavy, tal como estaba previsto, y se vio al vehículo combinado dar tumbos de un extremo a otro antes de explotar.
La nave alcanzó una altitud máxima de 37 km antes de desintegrarse.
No estaba claro si la explosión había sido causada por el sistema automático de terminación del vuelo, que se activa cuando el cohete empieza a mostrar signos de fallo.
No obstante, los responsables de SpaceX celebraron en la retransmisión por Internet la hazaña de hacer despegar por primera vez la Starship y el cohete propulsor de la plataforma de lanzamiento, declarando el breve episodio en ese sentido como un vuelo de prueba exitoso.
Una multitud de trabajadores de SpaceX, que durante la retransmisión por Internet veían juntos una emisión en directo en la sede de la empresa cerca de Los Ángeles, vitorearon salvajemente cuando el cohete superó la torre de lanzamiento, y de nuevo cuando explotó.
El ingeniero principal de integración de SpaceX, John Insprucker, que actuó como uno de los comentaristas de la retransmisión, dijo que el vuelo de prueba proporcionaría una gran cantidad de datos importantes que allanarían el camino para que la compañía siguiera adelante con pruebas adicionales.
Musk dijo en Twitter que el próximo lanzamiento de prueba de la Starship sería dentro de unos meses.
«¡Felicidades al equipo de @SpaceX por un emocionante lanzamiento de prueba de Starship! Hemos aprendido mucho para el próximo lanzamiento de prueba en unos meses», tuiteó. Musk, que compró Twitter el año pasado por 44.000 millones de dólares, es también consejero delegado del fabricante de coches eléctricos Tesla Inc.
El camino hasta el accidente del jueves no ha estado exento de pruebas y contratiempos previos.
En febrero, una prueba de encendido estático del Super Heavy mientras estaba atornillado a una plataforma logró encender sólo 31 de sus 33 motores Raptor, y una prueba de encendido estático anterior en julio de 2022 terminó con la explosión de la sección del motor del vehículo.
Antes de eso, SpaceX había lanzado prototipos de la mitad superior de la Starship en cinco vuelos subespaciales a una altitud de 6 millas (9,7 km), tratando de perfeccionar su capacidad de aterrizaje de retorno. Todos menos uno se estrellaron en llamas.
La espectacularidad de la pérdida el jueves del primer vehículo Starship totalmente integrado con un propulsor durante su lanzamiento inaugural puso aún más de relieve los retos a los que se enfrenta SpaceX para ir más allá de su cohete Falcon 9, la pieza central del negocio de lanzamiento de satélites de la empresa.
Sin embargo, incluso un vuelo de prueba de manual como el del jueves habría terminado, por diseño, con el aterrizaje forzoso de ambas partes de la nave espacial en el agua.
Tanto la etapa inferior del Super Heavy como la superior del Starship se diseñaron como componentes reutilizables, capaces de regresar a la Tierra para realizar aterrizajes suaves, una maniobra que se ha convertido en rutina en docenas de misiones de los cohetes orbitales más pequeños Falcon 9 de SpaceX.
Sin embargo, ninguna de las dos partes de la nave se habría recuperado en el lanzamiento del jueves. En su lugar, el plan de vuelo preveía que la etapa inferior cayera en el Golfo de México tras separarse de la etapa superior, que habría descendido en el Océano Pacífico, cerca de Hawai, tras alcanzar casi una órbita terrestre completa.
Según Musk, ya hay varios cohetes Super Heavy adicionales en Boca Chica (Texas) para futuros vuelos de prueba.
Reuters/Abril 20 de 2023
