Entrenar las capacidades operativas para afrontar los retos de operaciones militares complejas mediante misiones aéreas compuestas (COMAO). Este fue uno de los principales objetivos del Ejercicio Conjunto Escudo-Tínia 2023, que tuvo lugar en las bases aéreas de Canoas (BACO) y Santa Maria (BASM), así como en las ciudades de Santana da Boa Vista (RS) y Caçapava do Sul (RS), del 30 de octubre al 17 de noviembre. El entrenamiento contó con la participación de 12 escuadrones aéreos, unidades de infantería de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) y grupos de artillería antiaérea (GAAAe) de las tres fuerzas armadas.
La sexta edición de EXCON Shield-Tinia tuvo un aumento en comparación con años anteriores: las diversas aeronaves que participaron en el entrenamiento se entrenaron en acciones ofensivas y defensivas en la misma medida en operaciones multidominio, que incluyen espacios aéreos, terrestres, marítimos, espaciales y cibernéticos, lo que hace que los vuelos COMAO sean aún más complejos y dinámicos. «La principal diferencia este año es que el ataque y la defensa no tienen una definición exacta de quién ataca y quién defiende. En otras palabras, aquí todo el mundo puede ser atacante en un momento y defensor en otro, y esto hace que el escenario sea muy dinámico y nos permite evaluar a todos los pilotos de diversas maneras», afirmó el Comandante del BASM, Coronel Luciano Antonio Marchiorato Dobignies.
Sin embargo, antes de entender cómo funcionaba cada aeronave en EXCON Shield-Tinia 2023, es importante comprender cómo se planifican las operaciones COMAO. ¿Cómo se crean? ¿Quién las coordina? ¿Cómo se estructuran?
En primer lugar, es esencial entender que el COMAO es un grupo de aeronaves con perfiles diferentes y doctrinas específicas que despegan en un corto espacio de tiempo, buscando un objetivo común y en apoyo mutuo: cumplir acciones complementarias de la Fuerza Aérea en términos de garantizar la superioridad aérea en un escenario de guerra convencional. La actividad operativa promueve la interacción de varias aeronaves de la FAB y de grupos de defensa antiaérea en un mismo contexto de entrenamiento. Para la EXCON Escudo-Tínia 2023, se emplearon aeronaves de caza, inteligencia, vigilancia y reconocimiento, ala rotatoria y transporte para diversas actividades de entrenamiento, incluyendo aire-tierra, reconocimiento aeroespacial, reabastecimiento en vuelo (REVO), búsqueda y rescate en combate (CSAR), coordinación del espacio aéreo, operación de Aeronaves Pilotadas Remotamente (ARP) y seguridad de vuelo.
Empleo de cazas
Entre las acciones previstas para los 16 cazas F-5M empleados en el ejercicio se encuentran misiones de ataque, alerta en vuelo (ALEVOO), escolta y barrido. El Comandante del Primer Escuadrón del Decimocuarto Grupo de Aviación (1°/14° GAV) – Escuadrón Pampa, Teniente Coronel André Navarro de Lima Guimarães, explicó cómo se desarrollan las misiones de barrido en el campo de batalla. «El objetivo principal de este tipo de acción es limpiar y sanear las áreas de interés, para permitir que las demás aeronaves del paquete COMAO, de las misiones aéreas compuestas, realicen sus misiones específicas. Además, los aviones F-5 también llevaron a cabo misiones defensivas con el objetivo de proteger zonas con objetivos preestablecidos», afirmó.
Otro caza que también tuvo una fuerte presencia en el conflicto simulado fue el A-1M, que entre sus acciones gestionó las formaciones COMAO, siendo el Comandante de Misión (MC) el responsable de planificar este tipo de vuelos. «En esta edición, la aeronave A-1M está desempeñando un papel fundamental al actuar no sólo dentro de la fuerza ofensiva, sino también como fuerza contraria, además de contribuir en el contexto del Escudo, siendo utilizada como apoyo al empleo de nuestro sistema de defensa antiaérea enemigo», afirmó el Comandante del Tercer Escuadrón del Décimo Grupo de Aviación (3º/10º GAV) – Escuadrón Centauro, Teniente Coronel Felipe de Faria Scheer, uno de los pilotos que operó la aeronave durante el ejercicio.
Otros aviones de combate, como el A-29 y el AF-1 de la Marina de Brasil (MB) también estuvieron presentes en EXCON Escudo-Tínia 2023, con la tarea de identificar y atacar objetivos terrestres con armamento convencional.
Inteligencia y reconocimiento aeroespacial
Las misiones de Inteligencia, Vigilancia y Reconocimiento (IVR) son esenciales para planificar el despliegue de algunas de las aeronaves utilizadas en el ejercicio. Entre las aeronaves utilizadas en estas operaciones se encontraba el RQ-900 Remotely Piloted Aircraft (RPA), operado por el Primer Escuadrón del Duodécimo Grupo de Aviación (1º/12º GAV) – Escuadrón Horus, que, por ejemplo, rastreó datos de inteligencia en la zona del conflicto.
El avión E-99 también desempeñó un papel crucial en las misiones del COMAO, actuando como puesto de control aeroespacial y de comunicaciones en el aire para proporcionar el telón de fondo táctico a otros aviones de entrenamiento. «La principal diferencia en el ejercicio Shield of Virginia de este año fue la mayor complejidad de la zona de conflicto, debido al elevado número de aeronaves implicadas, así como a la mayor capacidad del enemigo. Como resultado, fue necesario que controladores y pilotos interactuasen de forma más sinérgica para alcanzar nuestros objetivos dentro del escenario», destacó el Comandante del Segundo Escuadrón del Sexto Grupo de Aviación (2º/6º GAV) – Escuadrón Guardián, Teniente Coronel David Dantas da Silva.
Alas rotatorias y aviación de transporte
Mantener la capacidad de exfiltración e infiltración de personal, con y sin aterrizaje, desde la zona de operaciones; liderar formaciones en misiones operativas; y navegar a baja altura y por curvas de nivel. Estas fueron algunas de las misiones del avión H-60 Black Hawk en el Ejercicio Shield-Tinia 2023. «La idea es llevar a cabo un rescate simulado, esquivando las defensas antiaéreas en tierra. Tenemos que ser capaces de volar sigilosamente, sin ser identificados, para llegar al lugar previsto para llevar a cabo nuestro rescate», explicó el Comandante del Quinto Escuadrón del Octavo Grupo de Aviación (5º/8º GAV) – Escuadrón Pantera, Teniente Coronel Rodrigo Alonso Fortes.
Dos aviones C-105 Amazonas y un KC-390 Millennium se utilizaron durante el ejercicio para llevar a cabo estas acciones durante las misiones COMAO. El KC-390 también desempeñó un papel clave en las operaciones de reabastecimiento en vuelo de los cazas F-5M para aumentar su operatividad y autonomía de vuelo.
Contexto Escudo
Las ciudades de Santana da Boa Vista (RS) y Caçapava do Sul (RS) fueron las regiones elegidas para desplegar las Unidades de Infantería (UInf) de la FAB y los Grupos de Artillería Antiaérea (GAAAe) de las tres Fuerzas Armadas. La Operación Escudo Antiaéreo, coordinada por el Mando de Operaciones Aeroespaciales (COMAE) en el contexto del Ejercicio Conjunto Tinia, tuvo como objetivo el entrenamiento de la aviación antiaérea del país en un escenario de guerra simulado, centrándose en las misiones del COMAO.
El Comandante del Primer Grupo de Defensa Antiaérea (1º GDAAE), Teniente Coronel de Infantería Leonardo Schiller Cechin, destacó la importancia de este entrenamiento. «El Escudo Antiaéreo realizado en Santana da Boa Vista es de gran importancia para los grupos de defensa antiaérea de la Fuerza Aérea Brasileña, pues es aquí que podemos simular ataques de aeronaves y nuestro enfrentamiento a ellas en defensa de los puntos sensibles de nuestra jurisdicción», explicó.
FAB/Noviembre 22 de 2023