El Departamento de la Fuerza Aérea de EE.UU. concedió 108 millones de dólares a Northrop Grumman para la adquisición anticipada en apoyo del programa B-21 Raider.
Los fondos de adquisición anticipada apoyarán directamente la adquisición de artículos de larga duración necesarios para construir el primer lote de aviones B-21 de producción. La adjudicación de la adquisición anticipada reafirma el compromiso de la Fuerza Aérea con el que se convertirá en la columna vertebral de la flota de bombarderos del siglo XXI.
«El programa B-21 Raider es fundamental para el imperativo operativo de la Fuerza Aérea de contar con una familia de sistemas de ataque de largo alcance que garantice nuestra capacidad de atacar cualquier objetivo, en cualquier momento y en cualquier lugar, incluso en el entorno más conflictivo», dijo el Jefe de Estado Mayor de las Fuerzas Aéreas, el general CQ Brown, Jr.
«Mientras la Fuerza Aérea celebra su 75º aniversario, el Raider es un ejemplo destacado de la innovación y la búsqueda de tecnología revolucionaria que ha caracterizado a nuestro servicio desde su creación», continuó Brown. «La calidad de la construcción del avión, junto con su diseño de arquitectura de sistemas abiertos y su margen de crecimiento futuro, proporcionará a nuestros combatientes la ventaja competitiva que necesitaremos para disuadir los conflictos actuales y futuros, y para luchar y ganar si se nos pide que lo hagamos».
Los aviones de prueba B-21 que se están fabricando actualmente en el marco del contrato de desarrollo de ingeniería y fabricación con Northrop Grumman se están construyendo en la misma línea de producción, utilizando las mismas herramientas, procesos y técnicos para construir los aviones de producción.
«Los aviones de prueba B-21 son los aviones más representativos de la producción, tanto estructuralmente como en sus sistemas de misión, en este punto del programa, que he observado en mi carrera. Se están tomando las decisiones correctas en este programa para preparar el camino para una campaña de pruebas de vuelo de alta fidelidad y una transición efectiva a la producción», compartió Randall Walden, director de la Oficina de Capacidades Rápidas del Departamento de la Fuerzas Aérea.
El primer avión de pruebas de vuelo B-21 ha entrado recientemente en la fase de calibración de cargas para someterse a las pruebas de verificación y validación de su diseño estructural antes del vuelo. Después de la calibración de las cargas, la integración y las pruebas en tierra informarán sobre el calendario del programa y la preparación para el vuelo.
El progreso continúa en todos los elementos del programa B-21. La Ley de Asignaciones de Defensa del año fiscal 2022 proporcionó financiación para cinco nuevos proyectos de construcción militar para poner en marcha la misión del B-21 en la Base de la Fuerza Aérea de Ellsworth, Dakota del Sur, la primera base de operaciones principal del Raider. Ya está en marcha la construcción de un hangar de mantenimiento de baja visibilidad, el primero de este tipo en la base de bombarderos convencionales de 80 años de antigüedad.
Está previsto que este año se inicie una declaración de impacto ambiental que sirva de base para las decisiones finales sobre la segunda y la tercera base principal de operaciones para el asentamiento de toda la flota de B-21. Tal y como anunció el Secretario de la Fuerza Aéreas en 2019, las ubicaciones preferidas para la segunda y tercera bases operativas principales del B-21 son Whiteman AFB, Missouri, y Dyess AFB, Texas, respectivamente.
USAF/WASHINGTON (AFNS). Abril 07 de 2022
