Cada año, los equipos de mantenimiento de aeronaves de todo Estados Unidos ponen a prueba sus habilidades y conocimientos durante la Competición de Mantenimiento Aeroespacial (AMC). El evento, que reconoce y celebra a los técnicos de mantenimiento de aviación (AMT), sitúa a la industria de la aviación y a la profesión de AMT en un escenario nacional. ¿Qué es diferente este año? El primer equipo femenino de American competirá por primera vez.
Las AMT Elena González, Meylin Concepción, Pari Soneji, Allison Codd, Malinda Hamm y Regina Patronie se reunirán desde todo el país para representar al primer equipo AMT femenino de American, llamado Women in Tech Ops. Elena González, líder del equipo AMT, que tiene su base en el Aeropuerto Internacional de Miami, reflexiona sobre lo que la inspiró a compilar un equipo de mujeres este año.
«Hace unos años, cuando fui al AMC como miembro de la Asociación de Mujeres en el Mantenimiento de la Aviación, fue increíble ver a todo el mundo compitiendo, pero lo primero que me vino a la mente fue ¿por qué no hay equipos de mujeres representando a Estados Unidos?». dijo Elena. «Todo el mundo merece la oportunidad de dar lo mejor de sí mismo, y al hacer esto, puede que haya otras mujeres que se sientan inspiradas para participar».
El equipo quiere cambiar las cosas, no sólo en una competición históricamente dominada por los hombres, sino en la profesión en general. Allison Codd, que trabaja en American desde 2018 y tiene su base en el Aeropuerto Internacional de Dallas Fort Worth, siempre supo que quería seguir una carrera práctica y se sorprendió al encontrar un camino en la aviación que le permitía hacer precisamente eso. Ahora, espera dar a conocer este campo a otras mujeres.
«A veces, algunas de las carreras más técnicas dentro de la aviación no son suficientemente exploradas por las mujeres». dice Allison. «No siempre se trata de los músculos y de levantar objetos pesados; el trabajo es mucho más que eso y las mujeres deberían saber que es una carrera que está abierta a ellas».
Y aunque ha aumentado el número de mujeres que se incorporan al campo del mantenimiento de aeronaves, el camino para que las mujeres se introduzcan en el mundo de la mecánica no ha venido sin su propio conjunto de desafíos. «Para ser honesta, como mujer en este campo, a veces parece que tenemos que trabajar 20 veces más», dijo Meylin, una AMT con base en el Aeropuerto Internacional de Filadelfia. «Estoy en un mundo de hombres, así que tengo que asegurarme de que estoy representando en todo momento».
Pero incluso con las presiones añadidas de estar a la altura de sus homólogos masculinos, la recompensa siempre merece la pena.
«Personalmente, siento que siempre he tenido que demostrar mi valía trabajando con hombres en su mayoría. Quiero demostrarles que puedo hacer el mismo trabajo y que no necesito ayuda para hacerlo», añadió Malinda, una AMT situada en las instalaciones de mantenimiento de la base de American en Tulsa (Oklahoma). «Con el paso de los años, han entrado más mujeres en este campo y eso es fantástico. Me alegro de que haya una vía para ellas, porque este es un buen trabajo, realmente lo es. Me siento bendecida por estar en esta posición».
Pari Soneji trabajó como ingeniera aeronáutica en la India, pero cuando emigró a Estados Unidos, asistió al Vaughn College of Aeronautics and Technology y, para su sorpresa, se sintió inclinada a dejar el trabajo de oficina por un papel más práctico. Ahora, tiene una visión positiva de lo que su profesión le permite hacer y de las posibilidades que puede ofrecer a otros que buscan una carrera significativa y llena de oportunidades.
«Estoy contenta de ser AMT porque puedo estar cerca de los aviones que he estudiado y aprender sobre los sistemas de forma más práctica», dice Pari, que trabaja en el aeropuerto internacional John F. Kennedy. «Sí, a veces tienes que probarte a ti mismo, pero no dejes que eso te desanime. Hay mucha gente que estará ahí para apoyarte y animarte. Hay que trabajar duro, sí, pero las mujeres podemos hacer todo lo que nos propongamos».
A las mujeres que están considerando una carrera en el mantenimiento de la aviación, Elena les dijo: «Mantén tus opciones y tu mente abierta, no te limites. No sabes de lo que eres capaz hasta que lo intentas, así que ten esa confianza en ti misma para seguir adelante y poder abrirte puertas».
Cuando se les preguntó qué era lo que más esperaban de la competición, todas las integrantes del equipo coincidieron en que era conocer a otras mujeres mecánicas de todo el país. Regina Patronie, que comenzó su carrera de AMT en US Airways en 1999 y está basada en el Aeropuerto Internacional de Pittsburgh, compartió cómo ha cambiado la industria a lo largo de los años y por qué ver más mujeres en el campo es tan especial para ella.
«Llevo muchos, muchos años en esto, y entonces no éramos muchas las mujeres en este campo», dijo. «Ahora hay muchas más mujeres en la aviación y creo que es absolutamente maravilloso que las mujeres tengan ahora voz en este campo».
El equipo ha estado muy ocupado practicando y espera con entusiasmo el día de la competición, donde representarán a los AMT de American Airlines de todo el mundo.
«Estamos muy emocionadas por mostrar este equipo para American y mostrar lo que podemos aportar», dijo Elena. «Somos un equipo diverso tanto en culturas como en habilidades. Aportamos diferentes personalidades que nos permiten aprender unas de otras y crecer como individuos y como equipo.»
Y aunque es la primera vez que un equipo exclusivamente femenino compite por Estados Unidos, no será la última.
«Conocer a estas mujeres y ver cómo se comunican y trabajan juntas ha sido realmente inspirador», añadió Elena. «Creo que éste será el primero de muchos equipos femeninos que competirán en los próximos años».
American Airlines/Marzo 17 de 2022
